miércoles, 25 de abril de 2012

El decir no es comprobar y Muriendo en los mares



El decir no es comprobar 
Francisco Xavier

Dices que conoces lo espiritual
balbuceas que caminaste sobre los océanos
 que entre cielos te revolcaste
y llegaste hacia el cosmos.

Te quebraste los huesos para rehacerte
en las paredes descansas
de tu sangre ya no que nada
todo se fue por los vagos pensamientos
y sigues en esta vida.

Tal vez conozcas lo mortal y lo inmortal,
tal vez conozcas todo sobre la vida,
pero tu aspecto se evapora
frente al espejo.

Dices que hablaste con ella
te llevo a lo paralelo,
dices que existen los cielos
que nuestros cuerpos se vuelven luz
ante los ojos de lo desconocido.

El ojo secreto se vuelve nuestro juez,
con su mazo elimina al ser humano.
 Los espíritus danzan en luna llena,
los caminos se vuelven etéreos.


Muriendo en los mares.
Francisco Xavier

Son prismas en demolición
lo que el mar se traga.
Es la melancolía el creador de los mares,
en lo profundo del abismo todo muere.

Luces en el cielo como centellas se desintegran,
todo se acabo los animales se devoran
Debajo tiemblan los latidos de un corazón ahogado,
es el señor molesto con el humano.

Nada me ha salvado me encuentro aislado,
son los cantos de una mujer con cola de pescado
los que me tienen enredado, en la miseria de los pecados.
Su insufrible amor, me condena a morir aquí embocado

No paro de jadear no te puedo encontrar,
el atardecer se larga de lo desconocido.
En su lugar aparece la luna junto a ella cientos de destellos,
¿Estaré yo alucinando o tal vez elevando?

¿Son ángeles desnudos los que reposan sobre las estrellas?
 Los cisnes rodeándome sin parar me confundían.
Delfines volando e invocando niños con rosas,
como fusiles volaban las luciérnagas

La niebla amenazante se acercaba con ella una mujer brillante,
hermoso rostro y sonrisa mata demonios.
Estoy volando, todo el cuerpo se deshace,
soy una victima de la putrefacción
 

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